Ya casi terminamos el laundry y el baño. Las alfombras están fuera y el piso de losas puesto y limpio. Falta pintar pero, en el baño hay que quitar el papel primero. De eso les hablaré más tarde cuando empecemos a hacerlo. Estamos ahora a toda velocidad reparando la verja y los portones. Son importante para mantener afuera lo que que puede ser perjudicial y defender y mantener adentro lo valioso. En mi caso en particular mis dos perras, Nena y Chica. Ambas son muy valiosas para mi.
Hay una metáfora importante en este proceso de reparar y arreglar. Un poema de título en inglés, "Mending Fences", habla de lo importante que es este trabajo de arreglar las cercas entre los dueños de las granjas o fincas como decimos en Puerto Rico.
Describe el poema cómo los dueños de las fincas recorren juntos las cercas y al hacerlo marcan los límites de cada propiedad. Al encontrar alguna sección que necesitare reparación se aperciben de ello juntos. Porque el poema narra que ambos propietarios caminan este sendero regulármente y al hacerlo abren el espacio para mantener buenas relaciones. ¡Interesante!. ¿Cuántos de nosotros hacemos ésto en nuestras vidas y relaciones?.
Líimites saludables y definidos son necesarios para mantener buenas relaciones. Y esto requiere de madurez. No siempre nos gusta que nos digan "hasta aquí". O, "de aquí no puedes pasar". Pero, es necesario hacerlo.Un buen artista marcial entiende la importancia de preservar espacios seguros. Un espacio abierto es un punto débil en la técnica y un lugar donde somos vulnerables al ataque.
Así que a reparar la cerca. Ya compré los cerrojos. A ponerlos y a continuar reparando mi casa.
Sensei Myriam
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