viernes, 1 de abril de 2011

Porque lloro pero también rio....

La vida es tan extraña, pareciera a veces que ya lo tenemos todo cuadrado y... Zap!, de pronto un golpe o un gran cambio nos visita. Desorientados y confundidos comenzamos a hacer sentido de lo que nos rodea hasta el próximo momento de estabilidad para otro... Zap!. Esta es la naturaleza de la vida y creo que estoy comenzando a entender que con la práctica quizás, y digo quizás la confusión sea menor. Es como el atleta que luego de años de entrenamiento y acondicionamiento físico su tiempo de "recuperación" se hace más corto y efectivo permitiéndole continuar en la carrera.

La vida tiene muchos momentos homeopáticos. Me preguntas, ¿qué es eso?. El principio es utilizar una sustancia potenciálmente tóxica en pequeñísimas cantidades para promover la salud. Yo lo expreso de la siguiente forma utilizando el refrán, "Lo que no me mata me hace más fuerte.". Y así ha sido múltiples veces en mi vida. "Por qué insisto en hablar de ésto?", me preguntas. Yo también me he hecho la misma pregunta. No es que soy masoquista, como tampoco encuentro placer en el dolor. Es porque no hay luz sin sombras, y negarnos a ver la vida con todos sus tonos de blanco al negro con los grises en el medio es vivir una ilusión o estar dormidos, y dormida.... yo no estoy.

Se requiere valor para mirar y observar y abrirse a lo que es. Me da miedo, claro que si. Siento temor y dolor, no estoy loca ni enajenada. Sin embargo, vivo con la plena convicción de que detrás de cada lágrima le sigue una sonrisa que no hubiera sido capaz de nacer sin el efecto humanizante de la experiencia dolorosa. Me digo a mi misma, "Que se le va a hacer, ésto es parte de lo que me toca vivir, ésto también pasará." Y lo glorioso es.... ¡que pasa!

No soy una supermujer, como tampoco soy extraordinaria. Muy por el contrario, soy normal, corriente, usual y regular. Una cosa si, tengo algo dentro de mi a lo que le doy paso cuando no puedo más y me siento morir. Y confiando de que eso que está en mi interior es más grande que yo, me dejo morir por un tiempo porque se que muerta no me quedo y que volveré a vivir y a caminar y a reir.


"Nothing great has ever been achieved except by those who dared believe that something inside them was superior to circumstances."

-- Bruce Barton, advertising executive

mcr



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