miércoles, 26 de octubre de 2005

Frente al espejo...

El gimnasio municipal de Bayamón tiene un área grande para entrenar. Una pared tiene espejos. Allí frente los espejos mientras hacíamos los bokken suburi me vi. No necesáriamente era el físico que se promueve como el aceptable que es casi de anorexia. Hasta la hakama me la vi corta. Sin embargo, había algo... Mientras hacía los suburi, por un instante reconocí en la figura que se proyectaba frente a mi una intensidad e intención que no había visto antes. Hasta la piel de la cara y los brazos se veían diferentes. Duró sólo unos momentos pero algo sucedió. Y ese algo me lo llevé de allí para seguir trabajando y adelantando en la meta que me he propuesto conseguir. Algo también se quedó allí. Reconozco que me siento un poco más liviana. Alguna carga se desprendió con la realización de que si soy suficiente.

Sensei Myriam

No hay comentarios.: