Dije que me iba y me fui. Me fui a ser feliz. A liberarme de cargas que no eran mias. A buscar o quizás entender algo que es mejor, mucho mejor. Mas que buscar, es mejor ser encontrada, hallada. Tropezar con lo que se sabe que es pero que nuestro mismo esfuerzo y afán de encontrar no nos permite ver que está ahí. Siempre estuvo, esperando a que nos detuviéramos aunque fuera por un momento para ver.
Me fui a ser feliz. A vivir. Dejé atrás mucho de lo que pensé por mucho tiempo que si no lo tenía no sería feliz. Creía en mi ignorancia que me completaban cuando no había en realidad nada que completar. Completa estaba pero no lo entendía. Me hizo falta despegarme, dejar atrás todo lo que consideraba de valor. Y sí lo era pero, no por las razones que pensaba sino por causas y motivos muy diferentes a los que me imaginaba.
Estoy aquí en un lugar muy diferente y sin embargo, tan parecido al que dejé atrás. Un nuevo campo de batalla donde entrenar, ensayar y adiestrarme en el arte de vivir. Porque de eso se trata. De vivir y no de escapar, huir o evadir la lección que está programada. Parte del currículo fue en la isla donde muchos fueron mis maestros. La otra parte es aquí y son otros los que me enseñan que no es el lugar o las personas que me rodean con sus tramas particulares, soy yo y sólo yo la que hago la diferencia.
Me fui a ser feliz. No se cuando vuelvo. Pero si me ves, es muy probable que pases por mi lado y no me reconozcas.
mcr
2 comentarios:
Hola, como va? soy uno de los integrantes de acción poética ramos mejia, los que pintaron este mural. te queríamos agradecer por compartirlo!!
mi mail es gonzaderamos@hotmail.com x si me querse contactar, saludosss
Gracias por visitar mi blog... ¡Exito!
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