lunes, 11 de abril de 2011

Una invitación que no quiero hacer....


"You invite judgment into your life every time you judge others. To avoid this invitation to negativity, it’s best to stop focusing on others’ darkness."

-Yehuda Berg

Cada vez que juzgamos a otra persona estamos invitando el ser juzgados. Bastantes problemas y dificultades enfrentamos en nuestras vidas para estar evaluando a otros, ¿no te parece?. Sin embargo lo hacemos con frecuencia, concientes e inconciéntemente. Mucho trabajo tenemos con nosotros mismos para estar mirando a diestra y siniestra, ¿o es que nos consideramos completos, perfectos y realizados?. Cierto es que cuando interaccionamos con otros en el diario vivir pueden surgir situaciones que nos choquen un poco, nos parezcan extrañas a nuestra forma de pensar y sean hasta singulares. Esa es la realidad de la vida, cada uno de nosotros tiene sus propios dramas y rollos personales, son nuestros para entender y resolver. ¿Por qué ocuparnos de los rollos de otro, digo a menos que nos encontremos bien avanzados en el camino de la "perfección". Los indios americanos tienen un proverbio que habla de caminar en los mocasines de algún otro por un tiempo antes de intentar decir que conocemos y entendemos su vida. Pero somos tan prestos para juzgar en tantas sutiles formas. Si, si, se que a veces lo hacemos inconciéntementes, pero haríamos bien en entrenarnos para no hacerlo o hacerlo el menor número de veces. Yo lo hecho como se que tu también, me toca a mi trabajar con mi tendencia, debilidad o mal hábito. Y eso intento hacer. Al final de cuentas me conviene y es por mi mejor interés, no invito negatividad y me siento libre de ser.

mcr

No hay comentarios.: