Compartiré acerca de ésto más tarde cuando regrese del trabajo.... ¡Buen dia!.
De vuelta estoy, y quiero compartir algo que ha estado en mi pensamiento hace ya un tiempo. ¿De dónde comparto, de lo que me hace falta o de lo que abunda en mi?. "Extraña pregunta", pensarás. Pero, el fenómeno que me trae a compartir estas ideas es más común de lo que piensas.
Cuando nos acercamos a otros a veces lo hacemos buscando suplir nuestra necesidad de amor, comprensión, apoyo, y tantas otras cosas que también incluyen a veces lo material. Ese compartirnos a otro nace muchas veces no de lo que queremos aportar a la relación sino de lo que a veces es inconciente en nuestra psiquis. Yo lo he vivido desde los dos extremos, por un lado mi necesidad de ser amada o aceptada me ha llevado a extralimitarme en lo que doy de lo que tengo y de quien soy. Si otros han abusado de ello no es en realidad su culpa, es mia porque abrí la puerta a que sucediera. Vieron la oportunidad y la aprovecharon. Cuando nos compartimos por esta razón el resultado es una relación dispareja, incompleta y axficiante. Esto lo he aprendido desde la distancia. Me tomó dejarlo todo atrás y desde una nueva perspectiva mirar mi vida en general desde adentro y no desde las circunstancias externas que me rodeaban. Desde esa distancia he podido observar la dinámica de como otros con las mismas o semejantes necesidades se acercan y se enganchan creando un círculo vicioso de codependencia.... (continuará).
mcr
De vuelta estoy, y quiero compartir algo que ha estado en mi pensamiento hace ya un tiempo. ¿De dónde comparto, de lo que me hace falta o de lo que abunda en mi?. "Extraña pregunta", pensarás. Pero, el fenómeno que me trae a compartir estas ideas es más común de lo que piensas.
Cuando nos acercamos a otros a veces lo hacemos buscando suplir nuestra necesidad de amor, comprensión, apoyo, y tantas otras cosas que también incluyen a veces lo material. Ese compartirnos a otro nace muchas veces no de lo que queremos aportar a la relación sino de lo que a veces es inconciente en nuestra psiquis. Yo lo he vivido desde los dos extremos, por un lado mi necesidad de ser amada o aceptada me ha llevado a extralimitarme en lo que doy de lo que tengo y de quien soy. Si otros han abusado de ello no es en realidad su culpa, es mia porque abrí la puerta a que sucediera. Vieron la oportunidad y la aprovecharon. Cuando nos compartimos por esta razón el resultado es una relación dispareja, incompleta y axficiante. Esto lo he aprendido desde la distancia. Me tomó dejarlo todo atrás y desde una nueva perspectiva mirar mi vida en general desde adentro y no desde las circunstancias externas que me rodeaban. Desde esa distancia he podido observar la dinámica de como otros con las mismas o semejantes necesidades se acercan y se enganchan creando un círculo vicioso de codependencia.... (continuará).
mcr
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