sábado, 22 de octubre de 2011

Cuando más débil soy....


Extraño lo que a veces la vida trae ante nosotros. Extraño porque a veces no nos hace sentido cuando lo miramos a simple vista. Hay tanto y mucho más detrás de las apariencias de lo que se nos presenta, pero no vemos porque nuestra visión está limitada por lo inmediato.  Hoy doy gracias pero no siempre fue este el sentimiento que experimenté y como consecuencia en lugar de agradecer luché para cambiar lo que ocurría, sin resultado. Hoy no lucho o peleo, me esfuerzo si por entender y aún eso comprendo que no está del todo en mis manos. Hay un punto de indefensión que no es orfandad, de desvalimiento que no es abandono, es ciértamente debilidad cuando entiendo que por mi misma no soy suficiente. Pero no por sentirme débil soy menos, por el contrario se abre ante mi la promesa de recursos inimaginables e insospechados. Extraño, si muy extraño este nuevo sendero que siempre estuvo ante mi para caminar.

mcr