domingo, 4 de noviembre de 2012

Cuando escribo, escribo ...

Cuando escribo , escribo. Cuando comparto, comparto. A veces recibo la respuesta de algún lector señalando que algo que he compartido no va con la línea de pensamientos "positivos" que usuálmente comparto. ¿Qué le voy a hacer?. ¿Cambiar lo que pienso o siento para agradar al lector?. ¿No ofender sensibilidades? Pero, ¿si al hacerlo, violo lo que debe ser más importante cuando me siento a escribir, mi propia integridad de pensamiento y sentimiento que va a ser de mi?. No puedo controlar lo que otros hacen como tampoco lo que otros piensan o sienten. Una vez pensé que sí podía hacerlo y me retorcia, contorsionaba, me encogía y contraía para ajustarme a tantas y tantas otras formas que no eran la mia. ¿Y cuál fue el resultado?. Ninguno positivo que pueda mencionar. Aunque, puedo sí mencionar un resultado positivo, mi falta de éxito me llevó, me forzó a aprender la gran verdad de que soy responsable sólo de mi misma.

Así que, querido lector, si te inquieta, ofende o causa algún malestar lo que escribo o comparto en cualquiera de los medios que uso para expresarme, no es mi deseo ofenderte. Mi responsabilidad primaria es ser íntegra y honesta conmigo misma. Sólo soy reponsable de lo que yo siento, pienso y hago y te invito a tí a que hagas lo mismo. Te aseguro que como yo encontrarás una gran fuente de paz y fortaleza interna que nada ni nadie podrá arrebatarte.

mcr