Vivimos en un mundo donde impera la ley del más fuerte según aquellos que están en "poder". Es una dinámica de "quítate tú para ponerme yo". La competencia es férrea y en ocasiones inhumana. Digo inhumana, porque pasa por encima de las características que nos hacen humanos. Y se tienen como debilidades estos atributos que precísamente son las que hasta hoy hayamos podido sobrevir a las más grandes calamidades.
Escuchamos a muchos hablar del ying y del yang/ femenino y masculino. Y por más que lo intentamos no podemos ajustarnos a la imagen del ying y de lo femenino que impera en nuestros días. Por mucho tiempo me pregunté por qué era ésto. No lo entendí hasta hace muy poco tiempo...(continuará).
Sensei Myriam
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