Escribía en nuestra página hermana que la vida está llena no de obligaciones, sino de oportunidades. Es nuestra forma de ver las cosas y los patrones habituales los que nos llevan a considerarla como una carga pesada y difícil de llevar. Un cambio de perspectiva puede realizar el milagro de alcanzar lo que muchos llaman 'la alegría de vivir'.
En el dojo estoy en medio de un proceso que se sale de la norma general. Quiero hacerles una confesión que ilustra este proceso del cual les hablo. Hace unos meses atrás preparé un reglamento para el dojo. Mi mente pensó que si todo estaba escrito estaría más claro y definido para todos el funcionar del dojo. Sin embargo, el efecto fue lo opuesto de lo que esperaba. Hubo mucha resistencia. Iniciálmente me pregunté por qué. Dejé que el tiempo pasara y he comenzado a entender las razones. Tiene que ver con lo que les he venido hablando acerca de 'poder-sobre' versus 'poder-con'. He evaluado ideas de control, manipulación, recompensa y castigo, orden y caos, límites y restricciones, autoridad, lealtad además de muchas otros aspectos del interactuar entre individuos y la formación de una comunidad. La confesión es que el reglamento está en el zafacón...
¿Qué...?. Y ahora, ¿cuál es el orden?. ¿No habrá caos?. Ahora , ciértamente es más difícil. Hay que estar más en el presente. Hay que estar interactuando día a día mientras creamos nuestra realidad en conjunto. Ahora, todos somos responsables de lo que es. Hay que estar dispuestos a modalidades diferentes como autoridad con empatía. No hay nada escrito... día a día lo escribimos
juntos. Todos los días tenemos la oportunidad de hacer de nuestra práctica y de nuestro dojo lo que decidamos que éste sea...
Sensei Myriam
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