Los seminarios son un lugar interesante para ver en función el holograma de la comunidad de Aikido. Hay personas de ambos géneros y de diversas edades. Provienen de múltiples ámbitos del que hacer social de la comunidad. La gama de destrezas y habilidades es multiforme. Ninguno de nosotros estaría completo sin nuestro compañero. Entre todos le damos vida al cuadro de lo que es el Aikido. Una pequeña porción de una imagen holográfica contiene toda la información de la imagen total. Sin embargo, cuando la vemos desde lejos vemos un detalle aquí y otro detalle allá. En un seminario ocurre lo mismo. Somos un grupo de personas entrenando con ahinco y entrega para mejorarnos en el arte marcial que hemos escogido. Y sin darnos cuenta, poco a poco el arte empieza a moldearnos y cambiarnos para al final y quizás sin darnos cuenta escogernos a nosotros para manifestar un aspecto muy particular del arte mismo.
Sensei Myriam