¿Quién soy?..."Yo soy" (3)

Nos preguntábamos si el ego es todo malo. Pienso que no. He aprendido que los absolutos no existen. No hay blanco sin su contraparte negro. No hay alto sin su contraparte bajo. De la misma forma el ego es ambas cosas, útil y necesario. Como en ocasiones un obstáculo y tropiezo. Muchas de las condiciones emocionales de nuestra sociedad surgen de la falta de un ego...saludable. Y podemos mencionar la codependencia como un ejemplo de ello.

La vida está llena de paradojas y contradicciones. Y el ego es una de ellas. No puedo dedicarme saludáblemente a ninguna empresa sin antes definir quién soy. Y mi entrega a la causa que sea no será completa sin antes tener un centro estable desde el cual me entregue. Permíteme que te de un ejemplo de todos los días. Tiene que ver con el amor. Y no pienses que voy a ser cursi. No es posíble amar a un otro complétamente si mo me amo a mi primero...complétamente. Muchos piensan que esto es egoismo. Pero, no es así. Egoismo es pedir a un otro que me complete. "Soy tan feliz porque tu estás conmigo". " Soy tan feliz porque tu me completas"...oh,oh.Y qué pasa cuando se va?. ¿Es que mi felicidad depende de otro?. ¿Dejo de ser porque ya esa persona no está?. Veo estas cosas de relaciones en forma diferente. Si estoy con alguien o no, no es porque lo necesito sino porque me quiero compartir. Quiero dar de mi. Primero me tengo, luego me doy. No puedo dar lo que no tengo para dar. Ok, lo mismo sucede con todas nuestras acciones y relaciones. Y aquí es donde entra un ego saludable. Esa parte de nosotros que somos por nosotros mismos. Es cierto que es una parte que nos diferencia. Y eso que nos diferencia a su vez enriquece al todo. ¿Haz considerado porque nos afectan tanto las diferencias?. Cuando nuestro ego es débil, contínuamente buscamos afianzarlo con la aprobación de entes ajenos a nosotros. Si estos entes cambian nuestra seguridad se desmorona. Y como consecuencia podría venir la depresión. En una sociedad como la nuestra, donde se venden antidepresivos en cantidades billonarias podríamos tener una sociedad cuyo ego está enfermo.

¿Quién soy?. Contestar esta pregunta es parte de nuestro proceso de individuación. En ese proceso encontraremos luz y sombra. Al contestar la pregunta es importante que seamos honestos con nosotros mismos. No todo lo que vamos a ver nos va a gustar... Pero, si lo aceptamos nuestra respuesta al "quién soy" será una balanceada. No dependeremos de entes externos que justifiquen
nuestra existencia. No dependeremos de cuánto poseamos para sentirnos más; ni la ausencia de bienes nos hará sentirnos menos. La aprobación de terceros no será imprecendible para nuestro bienestar interior. Este proceso es uno contínuo. No se toman vacaciones ni sabáticas. Es una lucha de todos los días.