Al aikido se le conoce como el 'sendero de la paz' y muchos se confunden cuando ven discordia y conflicto entre los que lo practican. Es tanto así que a veces se actua como la frase en inglés, "elephant in the room", una frase idiomática que describe lo obvio ante todos pero que no se habla o se discute. Saotome Sensei en uno de sus libros habla que la armonía no es la ausencia de conflictos. Los conflictos siempre existen, como la fuerza de la gravedad existe y como la resistencia de los objetos moviéndose en cualquier medio existe con excepción de aquellos que se mueven en el vacio del espacio sideral. La clave es, ¿qué se hace con el conflicto?. ¿Cómo se maneja la energía conflictiva?. ¿Cómo se reconoce el origen del conflicto y cómo se redirige?. No estoy abogando por una abierta discusión de situaciones específicas. En la ausencia de madurez esto complica más y no resuelve. ¿Qué, entonces?
No me tapo los ojos con las manos y me digo "esto es el paraiso". No. Mientras hayan seres humanos practicando el arte habrá conflictos. Acepto el reto de abrir los ojos y ver que hay abusadores en el arte (bullies), que el ego impera como en toda actividad humana acompañada de la arrogancia y la altivez. Que hay discrimen y prejuicio por razón de género, edad y habilidades. Y al ver la realidad tal y como es trabajo con mi participación en el conflicto para que siquiera por un poquito la energía negativa disminuya en lo que a mi me toca.
El aikido es ciértamente el sendero de la paz.... pero ésta hay que trabajarla dentro y fuera del mat, por dentro y por fuera de nosotros. Y tener el valor de vivir con los ojos y el corazón bien abierto. Aprendiendo que barreras saludables mantienen la paz, si no alrededor nuestro, dentro de nosotros mismos.
mcr
